DESCRIPCIÓN
Las células de asiento son instrumentos para la medida de los asientos (desplazamientos verticales) del terreno. Su aplicación más frecuente es el control de asientos en las presas de materiales sueltos y en otras obras en las que la acumulación de arcilla, zahorra u otros materiales haga probable la existencia de asientos del material en cuestión.
Para su colocación, la célula debe quedar enterrada en el material durante de la construcción.
Este instrumento consiste en un sencillo mecanismo, debidamente protegido por un blindaje exterior, y con una base acoplada en su parte inferior.
Dicha base, además de facilitar la nivelación de la célula durante su colocación, sirve para integrarla mejor en el terreno y asegurar que los movimientos se transmiten de una forma correcta desde el principio.
El mecanismo interno se comunica con el exterior a través de tres salidas, a las que se conectan los tres tubos flexibles que comunican la célula con el panel de medida. Estos tubos se suministran embutidos en una misma funda de alta resistencia, que los protege de aplastamientos, roturas y facilita el estiramiento y conducción de los tubos hasta su destino.
|